lunes, 21 de enero de 2013

CUENTO DEL BUEN PASTOR CAPITULO CUARTO

CUENTO DEL BUEN PASTOR-CAPITULO CUARTO

Un cuento de: jorge godoy

                
                     ver capitulo primero                                   
                     ver capitulo segundo
                     ver capitulo tercero


         Brown y su Sra. esposa esperaban solo un milagro, pasaban horas reunidos en la iglesia junto a algunas pocas familias fieles, orando y pidiéndole al Señor por alguna solución, Brown sabia que tenia que venir.
---Queridos amigos, El Decía, ---Esta es una tierra de esperanza y hemos dado todo para que este valle permanezca en estado puro, pero ahora debemos dar mucho mas, no nos dejemos llevar por los egoísmos, no pensemos solo en dinero--- Proseguía diciéndoles,
---¿Que tal si vamos nuevamente a ver a nuestros vecinos y tratamos de convencerlos?, ----Yo se que no han perdido la fe aun, y puede quizá, que den vuelta atrás con sus ambiciones..  Brown les dijo eso y se marcho con su mujer al centro a llevar a cabo dicha tarea. Cuando llego fue al negocio de provisiones de comidas, el dueño, como otros, fueron traídos por Brown hacia un tiempo atrás a vivir allí. No es que Brown pensó en cobrarle nada, pero mientras le hablaba, lo miraba a los ojos profundamente y mientras le pedía que se quedara, recordaba aquellos primeros días de alegría, de mucho tiempo atrás, que ya había pasado y tenia ganas de decirle, " Te acordas, cuando pusimos juntos con nuestros vecinos, si, todos juntos hicimos fuerza para poner este poste de luz que esta enfrente de tu negocio para que muchos de los de acá tuvieran luz eléctrica",  y,  " Este piso de madera que pisamos hoy juntos, eran solo tablas, sin lustrar, sin cortar aun, y que sin embargo hoy , mira como relucen, hermosos", y así podría enumerar muchas cosas mas, todo lo que veía a su alrededor era obra de todos, pero Brown sabia que un buen cristiano no debe hacer favores y esperar algo a cambio, ¡no!  claro que no, Dios compensara a su debido momento.
    Brown después de hablar un rato con El, le dio una lista con las cosas que generalmente llevaba para comer, El comerciante dio vueltas y se fue para atrás del negocio a buscar las cosas, tardo un buen rato, solo trajo algunas cosas y les dijo:
---Perdón Sr y Sra Brown, pero me están entregando poco, y tengo que empezar a racionalizar, no son cosas mías, allá, en el Pueblo Grande tienen orden de no entregar muchas mercaderías con destino a nuestro pueblo, Usted sabe, cosas del Sr Smith.
--- Sr Brown, no es por nada, pero porque no vende Usted también, acá ya no queda mucho por hacer, tarde o temprano, Smith se quedara con el valle, y después empezaran las excavaciones, por eso del oro y la plata, vendrán gente nueva y el valle ya no sera el mismo... Le dijo el comerciante en señal de resignacion, El tampoco parecía convencido, pero era como si fuera arrastrado por la corriente y que ya nada pudiera hacer.
--- Gracias por las mercaderías que pueda Ud venderme, aunque sean pocas, comeremos... Dijo el Sr. Brown y juntos a su Sra esposa salieron del lugar.
     Así pasaron algunos días mas y comenzaron a escasear alimentos, bebidas, semillas y herramientas.

     Dado tal situación el Sr Brown, decidió ir a ver al Obispo, y, para su sorpresa, el mismísimo Obispo le aconsejo que no pusiera resistencia al destino, ---Sea lo que sea, Dios quiere que esto suceda y así debe ser--, le dijo el Obispo al Sr Brown.
     Brown volvio como había ido, con las manos vacias, sin embargo y a pesar del revés que estaba pasando, solo tres familias quedaban aun sin vender sus tierras. Pasado un poco mas de tiempo y ante la dificultad de conseguir lo mas minimo para la subsistencia, el Sr Brown y su familia quedaron totalmente solos. Mas de un año tuvo que soportar los dolores que proporcionaba la situación de aislamiento intencional,  provocado por la familia del Sr. Smith, pero con el correr del tiempo, todas las pruebas y excavaciones que se hicieron para dar con los yacimientos de oro y plata, felizmente para la familia Brown, fracasaron, los Smith, tuvieron que dar marcha atras con el proyecto, estaban perdiendo mucho dinero dia tras dia, razón por la cual los Smith, desestimaron esas tierras, tanto que se escucho decir al Sr Smith:
---Estas tierras están protegidas, he invertido muchisimo dinero en un negocio que era muy seguro. Yo se que el oro y la plata, estan ahí abajo del suelo, pero quien sabe porque razón tan poderosa hemos dado vuelta el valle y no se ha encontrado absolutamente nada.--- , dijo esto con un tono enojadisimo, dirigiendose a su familia y luego ordeno desestimar la busqueda y cancelar todo, para no seguir perdiendo su preciado dinero.
    
     --- Usted, Brown, ha ganado, ---  le decía Smith cuando lo fue a ver a su casa---  y, prosiguió diciéndole,  --- Es la primera vez en  mi vida que me ha tocado perder, su Dios debe ser muy poderoso y lo ha protegido a usted y su valle muy bien todo este tiempo,  asi que,  seguramente lo hará por resto de los dias, de veraz creo que su valle esta destinado solo para ustedes, y me vine hasta su casa para decirle que le devolvere las tierras a sus antiguos dueños---  y con un apretón de manos sello lo dicho, y antes de retirarse de la casa del Sr Brown, se volvió para decirle mirándolo firmemente a los ojos,
      ---¡Brown!, ---Usted nunca abandono a Dios y Dios, nunca lo abandonara a Usted y toda su familia, que tenga mucha suerte en este valle--- y luego se fue.
     Y así fue que,  El Sr Brown y su familia finalmente se reunían nuevamente con todas las familias amigas que regresaron y allí vivieron para siempre felices,  en el valle que Dios le había preparado.

                                                               FIN



    
       
 Estimado Lector, muchas gracias y hasta la proxima.